Apatzingán, Michoacán, 24 de marzo de 2025. Un nuevo ataque con un artefacto explosivo improvisado, similar a una mina terrestre, dejó como resultado un hombre herido y causó la destrucción de un vehículo cargado con limón en la localidad de Puerta de Alambre, en el municipio de Apatzingán. La explosión ocurrió alrededor de las 11:44 horas de este lunes, cuando la camioneta marca Chevrolet, color Uva, placas NH6475A, circulaba por un camino de terracería.
Este incidente es el último de una serie de explosiones que se han registrado en los últimos meses en distintas áreas rurales de Michoacán. El uso de minas terrestres y artefactos explosivos improvisados se ha convertido en una preocupante constante en la región, afectando tanto a la población civil como a las fuerzas de seguridad. En esta ocasión, aunque el saldo fue de un solo herido, el temor entre los habitantes sigue creciendo.
El incremento de estos ataques es parte de un patrón de violencia en municipios como Apatzingán y Buenavista, donde los grupos delictivos se disputan el control territorial. Zonas agrícolas como Las Bateas, El Alcalde, Los Charcos y Presa del Rosario han sido algunas de las más afectadas, con un notable aumento de enfrentamientos y explosiones. Las autoridades locales han intensificado la vigilancia para prevenir más incidentes, pero la situación sigue siendo de alta preocupación.
En medio de esta escalada de violencia, muchos habitantes de las comunidades afectadas se ven forzados a abandonar sus hogares, aterrados por el constante riesgo de nuevas explosiones y ataques. La incertidumbre y el miedo a convertirse en víctimas de estos artefactos mortales han dejado a muchas familias desplazadas, buscando refugio en otras zonas más seguras, aunque la situación en el estado sigue siendo crítica.
La Fiscalía General del Estado ha prometido continuar con las investigaciones para identificar y castigar a los responsables de este nuevo ataque, pero mientras tanto, la población sigue viviendo bajo la amenaza constante de nuevas agresiones.
Apenas en el viernes 21 de Marzo, un juez de distrito con sede en Michoacán otorgó una suspensión definitiva a un grupo de jornaleros, que ordena a la presidencia de la República y al gobernador de la entidad, Alfredo Ramírez Bedolla, realizar acciones necesarias para localizar y destruir las minas terrestres sembradas por el crimen organizado, así como evitar el desplazamiento forzado de los habitantes de la zona.
En este punto, ninguna autoridad se ha pronunciado hasta este momento, tampoco se ve que ese está trabajando para dar certeza a los campos minados que existen en la tierra caliente, pues como dato curioso, los propios elementos de ejército mexicano también han sufrido bajas al respecto, por explosivos terrestres improvisados.