Apatzingán, Michoacán, 14 de Noviembre de 2025. – En un sorprendente giro de los acontecimientos, donde los delincuentes brillan por su ausencia en las huertas, un imponente operativo del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional ha sido desplegado para proteger… a los limones.
Sí, leyó bien. La fruta ácida es ahora el centro de una operación de seguridad nacional. La «Estrategia Nacional de Seguridad Pública» dentro del “Plan Michoacán por la Paz y la Justicia” ha puesto sus ojos, sus armas y sus blindados en garantizar que el cítrico más famoso de la Tierra Caliente pueda ser cortado, empacado y enviado sin sobresaltos.
El enemigo a vencer: la extorsión fantasma. Aunque ningún criminal haya sido visto recientemente jugando a las escondidillas entre los árboles de limón, las fuerzas federales no se confían. Han iniciado un operativo integral que vigila desde que el limón es un bebé en el árbol hasta que viaja feliz en un camión. Patrullajes, reconocimientos y puestos de control aseguran que nadie, absolutamente nadie, le haga el feo a la fruta.
La misión, según fuentes castrenses, es «fortalecer el estado de derecho» entre la frondosidad de las huertas. Los productores, aunque un tanto confundidos al ver más soldados que trabajadores, pueden ahora respirar tranquilos. Saben que su derecho humano a cosechar, clasificar y vender limones está siendo protegido por lo mejor de nuestras fuerzas armadas.
La SEDENA fue clara: «Todo se hace con estricto apego a la ley y respeto a los derechos humanos»… de los limones, se sobreentiende. Mientras, los verdaderos delincuentes, desde sus escondites bien alejados de las huertas, seguramente se rascan la cabeza preguntándose por qué el objetivo militar de la semana es una rodaja para la cerveza, el taco o el menudo. ¡Habrase visto semejante barbaridad!





























