Tepalcatepec, Michoacán; 19 de junio de 2025.- Bajo un estricto operativo conjunto entre el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y la Policía Municipal, los cuerpos de la presidenta de Tepalcatepec, Martha Laura Mendoza Mendoza, y su esposo, Ulises Sánchez Ochoa, fueron velados anoche en medio de un clima de indignación y dolor. El doble homicidio, ocurrido en plena vía pública, ha sacudido no solo a este municipio sino a todo Michoacán, poniendo en evidencia la escalada de violencia contra funcionarios públicos en la región.
Un crimen calculado o ¿Ajuste de cuentas?
El ataque, perpetrado el martes al mediodía frente a la vivienda de la alcaldesa, fue ejecutado con precisión militar: un sicario —posiblemente acompañado de cómplices— disparó a quemarropa contra la pareja mientras regresaban de desayunar con Marianimilce Arrue Hernán, una excolaboradora del gobierno mexicano de origen cubano, quien resultó gravemente herida. Los agresores huyeron en un vehículo negro, lo que refuerza la hipótesis de un ataque planeado.
Arrue Hernán, de 55 años, no era una acompañante casual. Fue clave en la estrategia de grupos de autodefensa en Michoacán en 2013, lo que ha llevado a especular que el atentado podría ser una represalia del crimen organizado. Su condición sigue siendo crítica en un hospital local.
Tras el crimen, el Ayuntamiento suspendió actividades y las escuelas públicas y privadas cancelaron clases como medida de prevención. Organizaciones civiles y líderes políticos han exigido una investigación rápida y transparente, mientras la población reclama mayor seguridad en una zona históricamente asediada por grupos armados.
Entre la población comienzan a surgir caras y figuras conocidas hace una década mismas que conformaron las Autodefensas y empiezan a surgir preguntas como:
«¿Fue un mensaje? ¿Iba dirigido contra la alcaldesa o contra Arrue Hernán por su pasado en las autodefensas?», cuestionan vecinos. Las autoridades no han confirmado detenciones ni motivos, lo que ha aumentado la desconfianza en una region donde impunidad y violencia suelen ir de la mano.
Tepalcatepec es un municipio con alta presencia criminal, y este crimen se suma a una lista de ataques contra funcionarios en Michoacán. Solo en los últimos tres años, al menos cuatro alcaldes han sido asesinados o secuestrados, sin que existan sentencias contundentes en esos casos.
Martha Laura Mendoza se convierte así en otra víctima de una guerra no declarada, mientras el silencio de las fiscalías profundiza el miedo. El gobierno estatal prometió reforzar la seguridad, pero en las calles la pregunta persiste: ¿Quién sigue?
Mientras tanto, Tepalcatepec llora y espera respuestas. La sombra del crimen organizado se alarga sobre Michoacán, y la paz parece cada vez más lejana.